A partir de la declaración de la Organización Mundial de la Salud de la enfermedad infecciosa COVID-19, como una pandemia, la convivencia y actividades humanas se han visto alteradas trayendo como consecuencia la afectación social, jurídica y económica de los países, en Venezuela, tiene un antecedente de contracción económica de seis (6) años consecutivos que agrava el panorama de las actividades productivas, haciendo más retador añadir nuevos ajustes a los ya tomados por la coyuntura preexistente, de allí que sea necesario debatir sobre la posibilidad de nuevas negociaciones entre empleadores y organizaciones sindicales que modifiquen o revisen medidas peyorativas a las convenciones colectivas de trabajo ya acordadas y, con el desafío adicional de hacer esas negociaciones en cumplimiento de garantías de seguridad de salud y legales como el distanciamiento personal impuesto que hacen necesaria la incorporación de medios telemáticos para lograr las negociaciones y acuerdos.
Luis Augusto Azuaje
Universidad Bicentenaria de Aragua